
Así empezó nuestra rutina de noche (con cartón, dibujos y un beso)
A veces solo necesitas ver la portada para sentir ese no-sé-qué por dentro. Eso me pasó con Un beso antes de dormir. Tiene ese algo difícil de explicar, pero que te hace pensar: “este tiene que estar en casa, para mi peque”. Y así empezó todo.
No hace falta que nadie lo diga: se nota que es perfecto para bebés. Es grande, de tapa dura, y aguanta como un peluche que rueda por el suelo cada dos por tres. Y las ilustraciones… ay. Son tan tiernas que podrías dejarlo abierto solo para mirarlas. Pero no es solo mono: tiene una estructura sencilla, dulce, pensada justo para esos días en los que no buscas un cuento largo, solo un ratito.
Fue el primer libro que elegí para mi hija. No buscaba nada complicado, solo algo que nos ayudara a crear una rutina tranquila antes de dormir. Lo hojeé en la tienda y me pareció perfecto: sencillo y adecuado para su edad.

Un libro para dormir de 0 a 3 años
No hay una historia con principio y final. Solo escenas suaves, tiernas, donde animales —casi siempre mamás— despiden el día con un beso a sus crías. Una frase cortita, vuelta de página. Y así, sin hacer ruido, crea una rutina. Esa repetición les da calma a los peques, y sin que te des cuenta, ya estás en modo buenas noches.
Me llamó la atención una cosa: no hay papás en el libro. No es que me molestara, pero lo noté. Imagino que el autor quiso centrarse en las madres, y si lo ves desde el lado del mundo animal, tiene lógica. Al final, cada uno proyecta lo que quiere en un cuento así.
Mientras lo leíamos, mi hija se lo pasaba en grande señalando animales, preguntando cómo se llamaban, haciendo ruiditos. Lo educativo aparece sin buscarlo. No hay que forzar nada: simplemente estás ahí, compartiendo un rato con tu peque, y lo demás fluye.
Cuando crees que ya no lo vas a usar más…
Nunca fue su libro favorito, pero durante un tiempo formó parte de la rutina. Luego, como pasa muchas veces, dejó de elegirlo antes de dormir.
Pero cuando empezó primaria y comenzaron con las palabras en mayúscula, volvió a tener sentido. Porque no hay tantos libros escritos así, con frases simples y texto en mayúsculas. Resultó perfecto para empezar a practicar.
Puedes verlo aquí en Amazon, por si quieres más info.
Al final, Un beso antes de dormir ha ido y venido por casa según la etapa. Y aunque nunca ha sido el libro más llamativo, siempre ha estado ahí cuando hacía falta.
No todos los libros tienen que sorprender. Algunos solo tienen que acompañarte un rato.
Un beso antes de dormir (con muñeco)
Si buscas un regalo aún más especial, existe una versión de Un beso antes de dormir que viene con un peluche. Ideal para acompañar a tu peque en sus momentos de descanso y hacer la rutina de la noche aún más mágica.

¿Buscas más libros como este?
Si Un beso antes de dormir te ha llamado la atención, quizá te apetezca echar un vistazo a otras secciones de la web:
👉 Libros para niños de 0 a 3 años — pensados para los más peques, con propuestas que acompañan sus primeras rutinas.
👉 Libros sobre educación emocional — si te interesan las historias que ayudan a poner nombre a lo que sienten.Yo ya tengo unos cuantos favoritos en cada categoría
Nota rápida: En este artículo hay un enlace de afiliado. Si compras a través de él, recibo una mini comisión (sin coste extra para ti, por supuesto). Me ayuda a cubrir los gastos del sitio. ¿Las opiniones? Siempre sinceras: solo recomiendo libros que conozco y que realmente creo que pueden ser útiles.
Gracias por haber llegado hasta aquí.
Deja una respuesta